"El desierto se presentó a los primero cateadores como una "cosa a la vista", y ellos lo transformaron con los años en un "desierto a la mano", cuando hubo un habla pampina, cuando surgieron las primeras herramientas especializadas, cuando lo habitaron y recorrieron; le pusieron nombres a cada lugar y construyeron rutas y tambos.
Así, el desierto se fue desplegando frente al hombre y éste se disolvió en él, porque el hombre era también naturaleza.La naturaleza también humaniza, porque no es un ente pasivo, no está inerte, es activa y tiene vida.
El asombro fue el estado de ánimo de éstos primeros forjadores - y también de los que les siguieron-, en dos acepciones a saber:
- como temor o susto y
- como "hacer sombra u oscurecer algo"
El temor es al desafío del árido e inmenso desierto que podía asustar, incluso, desafiar con la muerte física.El desierto, por el desafío que ofrecía, el impacto a los sentidos, oscurecía cualquier experiencia anterior.Echa sombra sobre toda la existencia anterior del sujeto, transformándolo.Pero a su vez, el sujeto echa sombra sobre el desierto, se apropia de él, especialmente cuando lo habita, lo construye. Quien ha estado en él con el sol en el cenit, sabe lo que significa una sombra: ella reconcilia al sujeto con el entorno, invita al descanso, a la reflexión, al pensamiento, a lo humano."
Sergio González, sociólogo, Pampa Escrita, cartas y fragmentos del desierto salitrero, (Dibam 2006)
Así, el desierto se fue desplegando frente al hombre y éste se disolvió en él, porque el hombre era también naturaleza.La naturaleza también humaniza, porque no es un ente pasivo, no está inerte, es activa y tiene vida.
El asombro fue el estado de ánimo de éstos primeros forjadores - y también de los que les siguieron-, en dos acepciones a saber:
- como temor o susto y
- como "hacer sombra u oscurecer algo"
El temor es al desafío del árido e inmenso desierto que podía asustar, incluso, desafiar con la muerte física.El desierto, por el desafío que ofrecía, el impacto a los sentidos, oscurecía cualquier experiencia anterior.Echa sombra sobre toda la existencia anterior del sujeto, transformándolo.Pero a su vez, el sujeto echa sombra sobre el desierto, se apropia de él, especialmente cuando lo habita, lo construye. Quien ha estado en él con el sol en el cenit, sabe lo que significa una sombra: ella reconcilia al sujeto con el entorno, invita al descanso, a la reflexión, al pensamiento, a lo humano."
Sergio González, sociólogo, Pampa Escrita, cartas y fragmentos del desierto salitrero, (Dibam 2006)